martes, 30 de julio de 2013

El Low Cost o Cómo Morir en 3 días

Estoy muerta.
Del todo.
Acabo de volver del Low Cost y no me da la vida, y eso que para nada me desfasé tanto como otra gente, otra gente que conozco vamos. 

Un año mas (este es el segundo que voy, probablemente no el último) no me ha decepcionado nada: los conciertos han empezado puntuales; el recinto es cómodo y está limpio y bien señalizado; había muchísimos sitios donde cambiar los dineros y muchas barras con camareros rápidos; el césped se agradece por lo cómodo y fresquito y los vasos reciclables, mucho mas (nada que ver con otros festivales, donde el suelo es un gran vertedero). 

Si tengo que poner una pega, puedo poner dos ^-^. Una es que el domingo parecía que no hubieran limpiado demasiado bien los baños porque olían bastante (y a bastante distancia). La otra es el tema cobertura de móviles: había gente a la que el güasaaaa no le funcionaba dentro y los mensajes también daban problemas, y eso en un festival dificulta la organización. 

Como anécdota divertida, el domingo Mario Vaquerizo estuvo vendiendo camisetas en el puesto del merchandising antes del concierto de Fangoria, eso sí que es un tío currante y majo :).
Foto sacada de aquí
Y si queréis haceros una idea de el rollito del festival, en youtube hay vídeos resumen de los tres días (viernes, sábado, domingo).

Así que puedo ir apostando que el año que viene, a finales de Julio, estaré otra vez por Beniyork moviendo el esqueleto y dándole al Jäger (espero que no tanto como este, pobre estómago mío). ¿Nos vemos?

¡Besitos!

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